Escuela virtual de Sabiduría de Pamplona.

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¿Quién soy yo?

……….¿Qué pasa con las famosas cuatro preguntas de «¿Quién soy yo»?, «¿Qué hago aquí?», «¿De dónde vengo?» y «¿A dónde voy?» ¿Por qué no tenemos las respuestas amartilladas en nuestra mente y en nuestro corazón desde que éramos adolescentes? ¿Qué ha de decirse de una sociedad que considera esas cuatro preguntas como patrimonio de los adultos – y aun no de todos – y ni aun así sabe responderlas con carácter universal, al menos para los miembros de nuestra sociedad occidental? Quién soy yo

……….Lo que pasa, nos atrevemos a adelantar, es que ésas son preguntas para hacérselas a la Mente Superior. Y como los que estipulan lo que se debe enseñar o no saben que existe, o lo saben pero no la emplean, o tiene prejuicios respecto a ella y la ocultan, las respuestas no llegan. Se listan las preguntas, pero no las respuestas.

……….Y es que, a nivel de sociedad, nos falta Evolución a espuertas. Lo hemos dicho ya en otros artículos,

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En Occidente somos líderes en Tecnología y bebés de pecho en Ideología”.

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……….De la Ley del  Talión, la del “ojo por ojo y diente por diente”, se pasó a los Diez Mandamientos. Pero de esto hace ya más de 2.500 años … Y de ahí puede decirse que no hemos pasado. Seguimos con unas normas éticas y morales que eran posiblemente las adecuadas … hace 25 siglos.

Pero, ¿y en este intervalo? En pequeños círculos se han conocido mejoras, incluso la normativa óptima, que entonces se llamó Filosofía, afán por la Sabiduría, por el Conocimiento. Pero, a nivel general, el  más espantoso de los desiertos. Por eso, porque nuestra moral está desfasada, es primitiva hasta caer de un burro, insuficiente a todas luces, el nivel moral de nuestra sociedad es muy mejorable aún.

Y, como ejemplo de cómo no hay que ser, nuestros dirigentes políticos, o nuestros guías ideológicos. Es decir, los líderes. ¿Quién tendrá, entonces, interés en mejorar nuestro nivel de Evolución con enseñanzas acertadas?

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Quién soy yo

       Quién soy yo

………..

Cuando se hacen a la Mente Superior las cuatro preguntas citadas, ella da buenas respuestas. Tentado he estado de indicar aquí las respuestas, pero eso sería hurtarle al buscador que esto lee una oportunidad de oro para practicar con Ella.

Ahora, eso sí, ha de poner empeño en querer saber las respuestas. Preguntar para experimentar, para ver si responde la cosa ésa que dicen que hay, por mandato, por obedecer … es labor inútil. La Mente Superior la llevamos dentro, conoce nuestro interés y no se presta a experimentos de alquimia infantil, ni a juegos de manos.

De modo que ésas u otras, pero algo deseado y necesario. No como juego.

. Quién soy yo

     Foto, cortesía de MJC.            Siguiente articulo: Ideas primerizas sobre el Cuerpo Superior
. Quién soy yo

……….Fernando Conde Torrens es autor de «Simón, opera magna», «El Grupo de Jerusalén», «Año 303. Inventan el Cristianismo», «La Salud» y una serie de artículos sobre el mundo de las ideas. En  https://sofiaoriginals.com expone los resultados de sus investigaciones sobre la eterna búsqueda del ser humano.

. Quién soy yo

 © Copyright  Fernando Conde Torrens     125

. Quién soy yo

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4 comentarios en “¿Quién soy yo?”

  1. Sí, estoy de acuerdo con Ud. Dr. Conde: De nada vale que nos contesten esas preguntas si éstas no vienen de nuestro interior y se arraiguen en nuestra conciencia.

    1. Fernando Conde Torrens dice:

      Es decir, lo que cuenta es la práctica, no la simple aceptación de la teoría. Teoría sin práctica, apenas sirve de ayuda en la vida.
      O lo que es igual, es preciso una transformación, la «transformación alquímica» de los alquimistas. Ellos tenían que decir las cosas enmascaradas. Nosotros podemos decirlo por fin a las claras.

  2. Pedro Calvo dice:

    Desde la macrobiótica se afirma la práctica sin una teoría es peligrosa. La teoría sin una práctica es inútil. Estos principios referidos a la alimentación del ser humano. Y en relación a la vida es similar, vivir sin ética, sin moral es nefasto para nosotros y de rebote para los demás. Todos los conocimientos que esta página nos muestra sin ser practicados serían inútiles.
    Salud y belleza.

    1. Fernando Conde Torrens dice:

      Hace muchos años que dejé la Macrobiótica. Sirvió para lo que sirvió: Era el año 1.978. Yo tenía 33 años. Sufría una dolencia desconocida para la Medicina oficial, la llamaban los 12 Médicos de dicha Medicina a los que acudi en consulta «Urticaria mecánica tardía», hasta que un amigo Médico me dijo que eso no era un diagnóscico, sino que los síntomas que yo les contaba me los redefinian con palabras médicas: Se me hinchaba el cuerpo al sufrir roce, tan ligero como dormir sobre la almohada.

      No supieron darme solución los Médicos oficiales. Y lo hizo un «terapeuta» (no Doctor en Medicina) con la Macrobiótica. Me desapareció en pocas semanas algo que llevaba más de dos años sin poder solucionar, que me hizo hospitalizarme dos veces, pues se me inflamó la epiglotis. Y que me impedia salir a la calle cuando se me inflamaba la cara. Por fin pasó el peligro – tuve que quitarme el reloj y vivir sin tener en cuenta el tiempo, porque tenía algo que un Médico francés descubrió poco tiempo después, «estres». Desde entonces doy valor a las Medicinas alternativas si me resuelven un problema. También me empujó hacia una dieta casi sin productos animales. No me ocupé de estudiar las bases científicas de la Macrobiótica, lo confieso.

      Sobre lo demás que comenta coincidimos plenamente. Quienes viven sin Ética se condenan a sí mismos a tener una vida muy vacía, porque no se van a granjear el aprecio sincero de casi nadie. Y la Teoría que se da en esta Web ha de practicarse para que rinda frutos. Sólo con concerla y estar de acuerdo con ella no se consigue apenas nada. Y, a su vez, esa Teoría es fruto de una práctica previa del que la da. Nada es de libro, todo es de práctica previa repetida y contrastada luego con otras muchas personas. Pero en el origen de todo están las Capacidades Superiores.

      Un abrazo, Pedro

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