Datación por Carbono 14 del Evangelio de Judas por la NG
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LA DATACION POR RADIOCARBONO AUTENTIFICA EL EVANGELIO COPTO DE JUDAS. Datación por Carbono 14 del Evangelio de Judas por la NG |
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Un grupo de científicos ha aplicado la técnica de datación por Carbono 14 al ahora famoso manuscrito copto que contiene una transcripción del único Evangelio de Judas conservado hasta nuestros días. La antigüedad que se le ha calculado a este manuscrito lo sitúa entre los años 220 y 340 de nuestra era.(NC&T) El análisis ha sido realizado por expertos del Laboratorio AMS de la Universidad de Arizona en Tucson. J. Tim Jull, Director del Laboratorio, y Gregory Hodgins, Científico colaborador en la investigación, aplicaron la técnica del Carbono 14 a cinco muestras pequeñas de papiro y de la encuadernación de cuero del libro, cuya procedencia está en una colección de documentos antiguos, o códice, que fue descubierto hace sólo unos 30 años en Egipto. La edad obtenida mediante el Radiocarbono es una evidencia que ayuda a verificar que el texto antiguo presente en el papiro titulado «Evangelio de Judas», es un genuino manuscrito copto. Así lo dio a conocer la National Geographic Society en una Conferencia de Prensa en Washington D.C. hace unos meses. Jull y otros especialistas, entre los que figuran Historiadores, Teólogos y otros Científicos, ya tuvieron oportunidad de examinar el documento durante un Taller celebrado en Ginebra, Suiza, a principios de Diciembre de 2.004. El Evangelio de Judas consta de 26 páginas y fue escrito por ambas caras en 13 hojas de papiro. Las frágiles piezas han sido cuidadosamente montadas entre placas de vidrio, para permitir su lectura y protegerlas. Jull seleccionó las muestras para el Análisis por Carbono 14, después de debatir en detalle el tema con Rodolphe Kasser, un suizo considerado como uno de los expertos en escritura copta más destacados del ámbito mundial. Un experto en la conservación de papiros extrajo entonces las muestras. Terry Garcia, Directivo de National Geographic, las transportó en avión directamente de Ginebra a Tucson. Y las entregó en mano a Greg Hodgins, en el Laboratorio de la Universidad, encargado de efectuar la Datación por Carbono 14. Los Científicos tenían 5 muestras. Sin embargo, un fragmento de la encuadernación también contenía papiro, de modo que determinaron la edad de ambos materiales, en ese caso papiro y cuero. La edad de cada muestra individual coincidió plenamente, situando la creación del documento en algún momento entre el siglo III y el IV. El códice ha sido declarado un trabajo auténtico de antigua literatura cristiana apócrifa. Y por cinco frentes distintos: La datación con Radiocarbono, el análisis de la tinta, la fotografía infrarroja, las evidencias del contexto y las evidencias paleográficas. Se trata del hallazgo bíblico más destacado en los últimos 60 años, que aumenta nuestro conocimiento sobre la historia y los puntos de vista teológicos en los primeros tiempos de la era cristiana. El Evangelio de Judas presenta una versión de los hechos diferente a la que aparece en los Evangelios canónicos de San Mateo, San Juan, San Lucas y San Marcos respecto a la relación entre Jesús y Judas. Según este Evangelio recién descubierto, Judas actuó a petición del propio Jesús, cuando lo entregó a las autoridades romanas. |
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Martes, 06 Junio, 2.006 – 10:21 |
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Nuestro Comentario. Datación por Carbono 14 del Evangelio de Judas por la NG
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Este es un Editorial de Junio de 2.006. Y recoge que la datación del Evangelio en copto de Judas se escribió sobre un papiro que se arrancó de las orillas del Nilo entre los años 220 y 340 de nuestra era. Estas dos fechas corresponden a la fabricación del papiro. No a la fecha de escritura sobre él. Poque es a partir de que el papiro deja de ser una substancia viva que empieza a perder Carbono 14, para pasar a Carbono, 12, el normal.
El Carbono 14 es un isótopo, un elemento que se descompone y pasa a ser Carbono 12. Se va descomponiendo linealmente con el tiempo. Y averiguando cuánto Carbono 14 conserva todavía el papiro, se puede averiguar el fecha de la muerte del mismo como planta viva, a orillas del Nilo. Claro que la técnica hoy no permite sino dar un intervalo, que en este caso es de 120 años, entre el 220 y el 340. Y con eso debemos conformarnos.
Aqui añadiremos unas consideraciones sobre la posible historia de este papiro. Estamos en un año comprendido entre el 308 y el 315 de nuestra era. Un equipo redactor está ubicado en Augusta Treverorum, actual Tréveris, o Trier, en alemán. Tréveris está situado en el Sur de la actual Alemania. Algo más al Sur del tramo del Rhin ya horizontal, buscando la desembocadura. Están falsificando libros que quieren hacer pasar por antiguos. Y para ello necesitan papiros antiguos, viejos, oscuros. Para poder escribir sobre ellos los libros falsificados y que tengan aspecto de antiguos. Y eso es lo que buscan. Que por fin encuentran en algún almacén del Imperio. Y encargan se envíen a Tréveris, o Augusta Treverorum, cantidades ingentes de dicho papiro antiguo. Tan antiguo como del año 280, punto central del intervalo de datación.
Ese papiro llega y sobre él se escribe un libro redactado poco antes, que lleva por título «Evangelio de Judas». Digamos ahora que es en el siglo IV cuando se ha aprendido a encuadernar los libros en forma de códice. Antes, en los siglos I, II y III, los libros se editaban en formato rollo. Se escribía por un lado nada más. Y se metían en una cápsula de plomo, para que se conservaran y almacenaran en las estanterías de las Bibliotecas de la época. De forma que el formato códice atestigua que el libro es, efectivamente, del siglo IV. Y no de ningun siglo anterior. De ser anterior, estaría escrito en rollo, sólo por un lado.
Sin duda que con papiros gemelos del usado en el Evangelio de Judas en copto se escribió ese mismo Evangelio en griego. Tréveris (Augusta Treverorum) era la capital de la Prefectura de las Galias, la cuarta parte del Imperio romano. El lugar donde residía el Augusto de las Galias, Britania, Hispania y la Mauritania Tingitana, Constantino. Y tenía una Biblioteca privilegiada, con escribas que dominaban diversos idiomas. Uno de ellos era el copto, a lo que se ve.
En la Prefectura de Italia, contigua a las Galias por el Este, gobernaba Majencio, hijo de Maximiano. Maximiano había sido el Augusto de todo Occidente, antes de que él y Diocleciano cedieran sus puestos a Constancio Cloro y Galerio. Al primero, como Augusto de Occidente y al segundo como Augusto de Oriente. Pero cada uno estaba auxiliado por un César. A Galerio le apoyaba Maximino Daya, familiar suyo, en la Tracia. A Constancio Cloro le apoyaba Severo, en Italia. Esto sucedía en el pasado año 305, con nuestra manera de contar los siglos.
Pero Constancio Cloro estaba enfermo y moriría el año 306 en Eboracum (York), una ciudad importante del Norte de Britania. Y le sucedería su hijo Constantino, con la aprobación de Galerio. Por eso Constantino, dueño de la Prefectura de las Galias, llamó a Eusebio de Cesarea, erudito y amigo suyo, para formar el equipo redactor de los textos de la nueva religión que Lactancio le había propuesto tiempo atrás, en la capital de Diocleciano, Nicomedia.
Eusebio llegó a Augusta Treverorum, (Tréveris) en el año 307. Y se puso, junto con Lactancio, al trabajo de redactar de inmediato los Evangelios. Escribieron los cuatro Evangelios, tal vez hacia el año 313. Para poderlos entregar el año 314 a los Obispos, selecionados recientemente, en el Sínodo de Arlès (hoy Francia). Mientras tanto Constantino se había desplazado a Italia. Y en Roma había derrotado a Majencio, que resultó muerto en la batalla del Puente Milvio el año 312.
Después de redactar y entregar los Evangelios a los Obispos en el Sínodo de Arlés el año 314, Lactancio y Eusebio se dedicaron escribir otros libros, como una obra a un ficticio Obispo de Lyon, «Ireneo de Lyon», y el «Evangelio de Judas» que nos ocupa. Primero, le escribieron a Ireneo la obra «Contra las herejías». Y le hicieron decir que existía un cierto «Evangelio de Judas», que no era verídico. Es decir, «Ireneo de Lyon» cita el «Evangelio de Judas». Dado que a Ireneo lo sitúan en el año 189 de nuestra era, es un personaje inventado. Inventado hacia el año 315 o algo después. Tanto él como el «Evangelio de Judas» son falsificaciones. Están fuera del tiempo en que realmenet había cristianos: Despùés del año 314 en Occidente (Arlès) y después del año 325 en Oriente (Nicea).
Esto es lo que se puede decir de la obra que nos ocupa: Que es una falsificación del equipo redactor que escribió los Evangelios y sentó las bases para el Cristianismo, como si Jesucristo hubiera existido.
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